A pesar de que el panorama económico invita a pensar en que el mercado de coches de segunda mano está soportando el peso de la renovación o actualización de algunos usuarios de sus coches por otros ya matriculados previamente, salvo en un puñado de comunidades autónomas, el descenso en la transferencia de vehículos durante el mes de noviembre replica la tendencia a la baja que las altas de nuevo cuño ha mostrado tanto a lo largo del desastroso ejercicio anual como en el mensual.

Así, con un -6,9 por ciento en la comparativa respecto del mismo mes pero del pasado año, con un total de 174.532 transacciones monitorizadas, el acumulado de 2020 muestra una recesión del 14 por ciento al sumar cerca de 1,8 millones de venta y compra de coches de segunda mano.

Solo 1 de cada 5 coches de segunda mano salen de un concesionario

El descenso más acusado lo ha sufrido el grupo de vehículos con menos de un año de matriculación, con un hundimiento de más de la mitad de las operaciones (-53,6 por ciento), los coches más nuevos puestos en el mercado de segunda mano, kilómetro cero u ocasión de menor edad se han visto afectados de manera grave.

En contrapunto, los vehículos con una antigüedad respecto de su primera matriculación de entre 1 y 2 años marcan un aumento del 21,7 por ciento, similar al que muestra el conjunto de automóviles de entre 3 y 5 años con un 22,7 %.

Un porcentaje también similar a lo que ha supuesto el canal de ventas de este tipo de transacciones llevadas a cabo a través de concesionario que, con un 21,3 por ciento del total de ventas y compras de coches usados sumó un total de 37.237 cambios de titularidad.

Los coches más demandados han sido los de motor alimentado por gasóleo porque, a pesar de la tendencia entre los coches nuevos y las políticas predominantes, aún existen motivos suficientes para apostar por los coches diésel y el 59 por ciento de los coches usados comprados en noviembre de 2020 recurrieron al surtidor con el boquerel negro para su repostaje.

Pero si hay un dato representativo es el de las ventas de coches usados electrificados donde los diésel y gasolina de hibridación ligera aumentaron un 212 y un 137 por ciento respectivamente mientras que, los coches 100 por 100 eléctricos de segunda mano tuvieron un crecimiento del 123,5 %.

Las comunidades autónomas que marcaron un noviembre en positivo fueron, por este orden, Madrid (13,6 %), Canarias (3,6 %) y Cataluña (1,8 %), en el extremo opuesto, las que cerraron el pasado mes con un comparativo acusadamente peor fueron las Ciudades Autónomas de Ceuta (-30 %) y Melilla (-29,4 %) y Balerares (-20,2 %)