El nuevo Toyota C-HR Electric Hybrid arrancaba su comercialización con el lanzamiento de las nuevas versiones Premiere Edition, dotadas de máximo equipamiento y con precios nunca inferiores a 43.900 euros. En su haber, versiones dotadas con propulsores híbridos de notable potencia (200 y 200 H AWD, ambas de 197 CV)  que ahora se complementan con la llegada de una nueva variante híbrida de 104 CV (140 H) que se puede conseguir con los habituales acabados Active, Advance y GR Sport de la gama del compacto SUV japonés.

El nuevo Toyota C-HR 140 H Active pasa así a convertirse en el nuevo escalón de acceso de la gama media del fabricante japonés en nuestro mercado y permite hacerse con un SUV compacto de agresivo y atractivo diseño con un equipamiento bastante completo por 31.750 (promociones de la marca incluidas) y que además gracias a su etiqueta ECO nos va a permitir esquivar muchas de las limitaciones que las nuevas zonas ZBE de las ciudades nos imponen.

 

La versión más cara de esta nueva motorización que ahora se incorpora a la gama C-HR, la dotada con el acabado premium deportivo GR-Sport, se puede adquirir a partir de 40.500 euros, una sensible diferencia que se justifica por sus distintos aditamentos aerodinámicos y por una completa apuesta tecnológica en cuanto a sistemas embarcados y ayudas a la conducción disponibles para hacer aún más fácil y sencillo el manejo del coche, así como también mucho más seguro.

La incorporación de estas variantes híbridas no es la única novedad que se anuncia. Hay más, aunque todavía habrá que esperar algo de tiempo para disfrutar de ellas. Es el caso de las nuevas versiones híbridas enchufables PHEV con motor de 223 CV de potencia que se pondrán a la venta a partir del próximo mes de enero y que también contarán con la etiqueta 0 en su parabrisas frontal gracias a los 66 km de autonomía que en modo completamente eléctrico el C-HR puede desplazarse.

A la venta en enero, primeras entregas en primavera

En enero, los concesionarios de la red Toyota en España comenzarán a ofrecer este modelo a sus clientes, aunque las primeras unidades del mismo no llegarán a manos de sus compradores hasta entrada la primavera, ya en el mes de abril. Hasta entonces, serán las unidades híbridas autorrecargables HEV de la gama del C-HR las únicas realmente disponibles.

El Toyota C-HR goza de una gran popularidad en el mercado español. Es un vehículo altamente demandado por los compradores de coches en España, hasta el punto de que es en nuestro mercado donde el SUV compacto de Toyota disfruta de una mayor aceptación en el mundo, a excepción, claro está, de en el mercado doméstico japonés. Más de 100.000 unidades del modelo ya se han vendido en España y su éxito es una de las claves que marcan el actual buen momento que la firma tiene en nuestro mercado, donde Toyota está posicionada como actual líder de ventas del mismo.

Esta nueva segunda generación del C-HR mantiene prácticamente invariadas las medidas que el modelo ofrecía en su primera entrega. A la venta desde 2017, la primera generación vino a reemplazar a uno de los modelos de mayor aceptación de la marca, el RAV 4. Y si de algo no se quejaron los algo más de 870.000 clientes que adquirieron uno de aquellos modelos fue precisamente de las dimensiones del mismo, medidas que la gran mayoría de ellos calificaron de ”adecuadas”.

Prácticamente igual de tamaño

Esta segunda mide lo mismo en longitud y altura (4360 mm y 1.555mm respectivamente), aunque ofrece una mayor anchura (1.830mm frente a los 1.795 mm anteriores) lo que se agradece al viajar en él dada la mayor habiltabilidad interior de la que ahora disfrutan los ocupantes del vehículo. Habitabilidad en anchura, pues el reparto de espacios viene siendo prácticamente el mismo dado que la cota que favorece el mismo, su distancia entre ejes, permanece igualmente invariada (2.640mm).

Exterioremente, la crudeza del diseño en cuanto a formas y geometría que presentaba la primera generación del C-HR se ha suavizado con el tiempo. De las rupturistas formas que presentaba aquella primera muestra a las del actual hay nada menos que más de tres decenas de rivales en el segmento que han ido amoldando el imaginario general a la nueva estética imperante en el mercado para el segmento de los SUV compactos, entre los cuales el C-HR fue uno de los primeros en llegar, al igual que en su día el RAV 4 fue uno de los pioneros —si no el primero— en popularizar este tipo de vehículos.

La marcada línea de diseño en forma de coupé deportivo de abruptas y rompedoras líneas de la primera generación del C-HR se mantiene, aunque las líneas ahora se presentan de manera más suavizada y sin los bruscos cambios de plano que se marcaban en la carrocería de la primera.

Clásico estilo crossover

Mantiene eso sí su clásico estilo crossover y su peculiar atractivo, ese que tanto éxito le ha proporcionado y que sin duda ha marcado al de modelos que han llegado tras él, como pueden ser los Kia XCeed o Cupra Formentor que también tanto gustan en nuestro mercado.

Una estética de tintes muy deportivos pero muy alejada de la que ofrecen otros modelos también presentes en el segmento como pueden ser los Seat Ateca o  Nissan Qashqai pero que igualmente gozan de gran atractivo y popularidad en el mercado, lo que afortunadamente indica que hay espacio para todos siempre y cuando el producto sea bueno.

Las nuevas líneas de esta segunda generación del C-HR le aportan una imagen mucho más actualizada y moderna, incidiendo aún más en esa “camuflada” deportividad que su estética aporta gracias a esa falsa imagen de coupé que el modelo presenta, dado que se trata de un modelo cinco puertas que además cuenta con una aerodinámica convencional para un modelo de la categoría (=0,31 Cx).

Escuchar a los clientes

Eso sí, los diseñadores de Toyota han aprovechado esta nueva oportunidad para proveer al modelo de soluciones a algunos de los problemas que los usuarios de la primera generación detectaron o, cuando menos, tratar de eliminar las críticas que en su día recibió el C-HR en el momento de su lanzamiento.

Así, por ejemplo, se ha dotado al coche de una mayor luminosidad interior, especialmente en la zona correspondiente a la segunda fila de asientos. Para ello se ha dotado a esta segunda generación de una nueva ventallina lateral posterior y de una línea de cintura a menor altura, elementos que contribuyen a eliminar la claustrofóbica sensación que muchos viajeros denunciaban cuando ocupaban las plazas traseras del coche en sus viajes.

La mayor luminosidad también se ha logrado gracias a que ahora, por fín, se dispone ya de la opción de techo acristalado panorámico, un elemento cada vez más imprescindible para muchos usuarios —tantos casi como los que renuncian a disponer de este elemento por completo— y que en la primera generación no llegó a estar disponible.

Más accesible

De igual modo, en las puertas traseras las manetas exteriores de apertura también quedan más al alcance, especialmente de los niños, pues la elevada posición de las incluidas en la primera generación impedía que estos pudieran accionarlas en muchos casos y para un vehículo que en muchos casos era el vehículo familiar, tal ubicación suponía un problema en muchos casos.

 Aún así y pese a las mejoras incluidas, la habitabilidad interior del C-HR sigue sin ser uno de los aspectos fuertes en la oferta del modelo. Si bien ahora viajar en esta segunda fila de asientos resulta más cómodo que antes, dada la levemente mayor anchura del modelo, el espacio disponible a bordo de las plazas traseras no mejora al de otros modelos presentes en el mercado. Eso sí, al menos ahora tampoco lo desmerece. Dos adultos o tres niños pueden viajar cómodamente instalados en ellas, aunque también echarán en falta la ausencia de elementos como las bolsas o espacios para guardar objetos en las bandejas de las puertas o en los respaldos de los asientos delanteros, así como notarán la de las salidas de aire dispuestas en posición central, lo que en algunos casos conllevará a fomentar mareos en los viajeros más pequeños.

Buena calidad de acabados y terminación

Lo que no puede echarse en cara del nuevo C-HR es su calidad de realización ni su buen acabado. Buenos materiales, atención por los detalles y una terminación y ajustes refinados se ven acompañados por unos asientos de tapicerías y mullidos muy agradables en todas las plazas y especialmente en las delanteras, donde la amplitud, firmeza y confort son la nota predominante. Características que en la versión más deportiva de la gama, la futura GR Sport que se pondrá a la venta en enero, vendrá acompañada de una mayor robustez dado su mayor carácter deportivo.

El conductor tampoco sale malparado en esta segunda generación del C-HR. Ahora cuenta con mayor tecnología a su alcance y con una instrumentación completamente digital. El cuadro de mandos se articula en torno a una pantalla digital de 13.2 pulgadas que gracias a su capacidad de configuración permite disponer de la información necesaria y a su gusto. Información que se complementa con la que ofrece una segunda pantalla, esta de 12,3 pulgadas, donde se obtiene toda la información del sistema de infoentretenimiento a bordo, el multimedia Toyota Smart Connect, que se ubica sobre la consola central en el salpicadero. Evidentemente, el Toyota C-HR ofrece máxima conectividad para dispositivos dotados con sistemas tanto CarPlay como Android Auto.

Maletero mejorable

En cuanto a la capacidad de carga en el maletero, si la anterior generación no resultaba especialmente generosa en este envite, tampoco la nueva lo es. Con las cinco plazas habilitadas, apenas disponemos de 388 litros de capacidad, cifra que se ve reducida en función de las distintas versiones de la gama. La mayor capacidad pertenece a la versión más básica, la C-HR 200H, mientras que si optamos por la C-HR 200h perderemos 22 litros (364 en total) y restaremos otros dos litros más adicionales (362 litros) si elegimos la variante con tracción a las cuatro ruedas 200 H AWD-i .

En el mercado español, los dirigentes de Toyota piensan que serán las versiones Active, disponibles únicamente con el motor 140 H, las más solicitadas. Disponibles desde 31.750 euros, cuentan en su equipamiento con llantas de aleación de 17”, ópticas delanteras LED, sistema de acceso Smart Entry (sin necesidad de llave), el sistema multimedia Toyota Smart Connect (con pantalla de 8 pulgadas en este acabado), sistema de detección objetos en ángulo muerto y la cámara  de visión trasera.

Advance, la versión más recomendable

El acabado inmediatamente superior, Advance (desde 32.500 euros en versión 140 H y desde 35.000 con el motor 200H), añade a su equipamiento las llantas de 18 pulgada, regulación lumbar eléctrica en el puesto de conducción, asiento del acompañante con regulación en altura, sensores de parking delanteros y traseros con sistema de frenado automático,  alerta de tráfico posterior cruzado, cargador inalámbrico para dispositivos móviles, y pantalla central táctil de 12,3 pulgadas.

Opcionalmente, por 2.500 euros adicionales, se puede añadir al equipamiento el Advance Plus Pack, un compendio de accesorios entre los cuales se incluyen el acabado exterior en pintura bitono, con el techo siempre en color negro, portón trasero motorizado, faros delanteros de tecnología PrismaLED, elementos estéticos exteriores Style, el sistema de apertura inteligente Smart Digital Key, techo panorámico SkyView (sin parasol interior corredizo).

GR Sport, con traccion delantera o a las 4 ruedas

En cuanto a las atractivas futuras versiones GR Sport, estas se situarán en lo alto de la gama del Toyota C-HR y estarán disponibles en exclusiva con el motor 200 H tanto en configuración de tracción delantera (4×2) como a las cuatro ruedas (4×4) (38.500 euros y 40.500 euros respectivamente). La variante AWD-i contará con un motor eléctrico adicional ubicado en la zona posterior del vehículo cuya función es la de contribuir a accionar la tracción del eje trasero en los momentos adecuados.

Los GR Sport añaden a los equipamientos antes mencionados elementos como las llantas de 19 pulgadas terminadas en color negro a juego con el color del techo del acabado bitono exterior del coche, los proyectores delanteros de tecnología PrismaLED, asientos delanteros  Sport calefactables y con el logotipo GR bordado, iluminación ambiental interior inteligente y configurable al gusto del conductor, sistema Nanoe-X para la inonización de partículas de aire en el interior del habitáculo, el portón trasero monitorizado, entre otros muchos elementos.

En cuanto a las versiones mecánicas disponibles, la C-HR 200 H AWD-i GR Sport anuncia un conjunto híbrido compuesto por un motor 2.0 litros gasolina de 153 CV en combinación con dos propulsores híbridos, uno por cada eje, que entregan 113 CV (83 KW) el situado en posición anterior , y 41 CV (30 kW) el ubicado en la zona posterior. Un total de 197 CV, los mismos que ofrece la versión dotada exclusivamente con tracción delantera, que con un único motor trasero de 113 CV aporta el mismo potencial final (los 197 CV antes mencionados).

Ambas versiones alcanzan una velocidad máxima autolimitada a 180 km/h, aunque con una levemente mejor capacidad de aceleración, apenas un par de décimas,  en el caso de la variante de tracción total. Diferencia que se ve compensada por el menor consumo de la 4×2, cuyas cifras se quedan entre los 4,8 l/100 km y los 5,0 l/100 km de la versión AWD-i.

Ajustados consumos

Para los que busquen aún mayor economía en este último apartado, la mejor opción será sin duda decantar su compra por una versión C-HR-140 H (4,7 l/100 km). Esta cuenta con un bloque gasolina 1.8 litros que rinde 98 CV de potencia y se combina con un motor eléctrico de 95 CV (75 kW) para entregar un total de 140 CV de potencia. Gracias al empuje de ambas mecánicas, el SUV compacto alcanza los 175 km/h de velocidad punta, acelerando de 0 a 100 km/h en 9,9 segundos.

Todas estas variantes de los versiones 200 H (tanto la de 4 como la de 2 ruedas motrices ) y las  del 140H disfrutan ya de la avanzada tecnología incluida por Toyota en la quinta generación del eficiente sistema Hybrid que comercializa el fabricante japonés en los modelos de su amplia gama y que se estrenó con motivo del lanzamiento en 2023 del nuevo Corolla. Una mejora que se percibe claramente en el funcionamiento y manejo de esta nueva generación del C-HR.

Acertada renovación

Lo que está claro es que Toyota ha renovado acertadamente la gama híbrida del C-HR Electric Hybrid, con una oferta accesible y ya disponible en la red de oficial de concesionarios de la marca en nuestro país desde 32.500 euros o a razón de 200 euros al mes en el acabado Acabado Advance con el programa Easy Plus de financiación que la marca ofrece y en el que se puede disfrutar de 4 años de mantenimiento y de garantía incluidos en el precio. (48 pagos de 200 euros más entrada de 11.441,71 € de entrada y un último pago de 17.867,27 euros o valor de recompra garantizado del vehículo, lo que permite acceder a un nuevo modelo la marca).